El Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 del Gobierno de España presidido por Pedro Sánchez pretende proteger a los más jóvenes de uno de los males relativamente recientes de los videojuegos: las llamadas cajas de botín o loot boxes, cuyos mecanismos de recompensas aleatorias están pensados deliberadamente para fomentar la adicción. De este modo, el Ministerio de Pablo Bustinduy ha impulsado un anteproyecto de ley para proteger a los menores de edad de estas prácticas completamente predatorias y carentes de ética por parte de algunas desarrolladoras de videojuegos.