

La Dirección General de Tráfico (DGT) sanciona al año a unos 4 millones de personas al año, según los datos de la entidad, y cada año esta estadística tiende a aumentar llegando a los 5 millones durante el pasado 2022. Esto se debe a las numerosas infracciones que cometen los conductores, como rebasar el límite de velocidad, lanzar residuos por las ventanas del vehículo o fumar en el coche, entre otras.