

La reforma de las pensiones impulsada por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se aprobó paralela a la revalorización de las pensiones contributivas y no contributivas conforme al IPC. Se estableció que las pensiones contributivas se incrementarían conforme al dato que marcara la inflación, pero no así con las pensiones no contributivas, que aumentarían en mayor medida en favor de los grupos con una pensión más baja.